EL AIRE QUE RESPIRAS, Care Santos (RESEÑA CARIÑOSA)

La Patrulla de Salvación se apunta un gran tanto. ¡¡Tatachán!! Una de nuestras espías en la editorial Planeta ha conseguido una copia de las galeradas de El aire que respiras, la nueva novela de Care Santos que se publica el próximo 21 de febrero. La hemos leído de un tirón -sin respirar, sin parpadear y casi sin palpitar-, hemos dejado fluir nuestras sensaciones y nuestros fluidos, y hemos puesto negro sobre blanco nuestra opinión. Tenemos el honor [vaya primicia, Margaret, qué emoción] de presentarles en exclusiva mundial y para todos los  seguidores de Care Santos, la primera reseña del esperado, deseado y ansiado nuevo libro de la mejor escritora de España, de la sensación de las letras castellanas, de la Eugenia Rico de la era Facebook.

A modo de aperitivo, aquí tienes la sinopsis:

Virginia acaba de heredar el negocio familiar: la librería Palinuro. Entre el montón de ejemplares, polvo y papeles que su padre acumuló, pronto aparece la historia de Carlota Guillot y la búsqueda de un libro, escurridizo y caprichoso, que formó parte de una de las bibliotecas particulares más sibaritas de la Barcelona napoleónica. Una historia prolongada a lo largo de las décadas más convulsas del siglo XIX en que la ciudad asistió, incrédula, a su mayor transformación: el derribo de las murallas y la urbanización de su paseo más emblemático, La Rambla. El aire que respiras es un canto de amor a los libros, pero también a la ciudad de Barcelona. Después de leer esta gran historia coral, la ciudad no volverá a ser la misma. O será –otra vez– la que dejó de ser hace 200 años.

¿Están preparados? ¿De verdad? Pues en exclusiva desde el cuartel de la Patrulla de Salvación la primera reseña a nivel mundial de El aire que respiras:

El enamoramiento siempre es algo maravilloso. El que los lectores experimentamos de pronto hacia un autor, también. Reconozco que esta no será una reseña literaria al uso si comienzo proclamando mi enamoramiento rotundo y repentino hacia la obra de Care Santos, a quien debo admitir que nunca había leído antes de atreverme con las más de 400 páginas de esta última obra suya. En cambio, creo que digo mucho más de la novela de lo que pueda explicar después al afirmar que tras terminarla tuve que correr a buscar obras anteriores de la autora.

¿Relato generacional? Sí, sin duda, pero también mucho más. Esta novela es casi un grito de rabia. Un “aquí estoy yo” contundente. Un “os guste o no, así son nuestras cosas, las de los escritores de 40 que hemos venido para quedarnos”. Siento una curiosidad enorme por saber hacia dónde evolucionará el estilo de Care Santos. Me atrevo a sospechar que no podrá durar siempre su ausencia de convencionalismo y pienso que algo de conservadurismo -aun a muy pequeñas dosis- no le sentaría nada mal a su poderoso modo de ver y contar el mundo. Sea como sea, merecerá la pena esperar para ver.

Acaso el único matiz que conviene hacerle al libro sea producto de la maniática voluntad de la autora de documentarlo todo. Creo que una poda ligera la hubiera hecho aún más intensa. Aunque, sin duda, no se trata de nada que vaya en detrimento de la magnitud de la novela, que es indudable. Esa misma obsesión por el detalle, por un rigor que parece más patrimonio del historiador que del novelista, hace que la autora haya querido insertar al final del libro una nota final que viene a dar in extremis un giro sorprendente a la trama. Sea cierta o no, esa finta es magnífica.

Somos conscientes de que no hemos sido muy objetivas, pero es lo que hay. Ya lo hemos dicho muchas veces: cuando un autor nos gusta, nos gusta. No sé qué otra explicación quieren, leñe. Además: ya es tiempo de que el mundo del libro pague a Care con su misma moneda y reconozca la forma en la que ella se desvive por elogiar a todo el mundo. Viva la alegría, las buenas personas y el buen rollo. Care Santos for president!!

ACTUALIZACIÓN A 16/01/13

Por su interés reproduzco a continuación el comentario que dejó Care Santos –la misma- en este blog (aquí) a la 1:33h del día 12 de diciembre de 2011 cuando hablamos por primera vez de ella, de La tormenta en un vaso y de sus “críticas positivas”.

Con ustedes Care Santos:

 Nunca contesto cuando alguien me vitupera -aunque me divierte leer según qué barbaridades cuando se dirigen contra mí, lo confieso- pero hoy siento debo salir en defensa de los muchos colegas que colaboran desinteresadamente desde hace varios años en La Tormenta en un Vaso, un blog de crítica POSITIVA en Internet (el subtítulo lo dice todo, como bien ha apuntado Octavio), que coordino desde hace varios años. Y en el cual también colaboro, como ha quedado dicho, cuando me apetece compartir el entusiasmo que me han despertado ciertas lecturas.

Creo necesario puntualizar:

-Que La Tormenta en un vaso es un blog independiente, entendiendo como tal que no estamos supeditados ni, por supuesto, favorecemos a ningún sello editorial ni a ningún grupo. Sin embargo, en nuestras intenciones primeras estaba el dedicar espacio a los sellos independientes que han surgido y surgen en los últimos tiempos. Cosa que hemos hecho y seguimos haciendo.

-Que en el espíritu inicial estaba también el servir de recomendadores cualificados de lecturas a cualquier persona que ame los libros. Por eso nuestras reseñas siempre son positivas. La cualificación de los críticos es innegable. En ellos radica todo el valor de la página, que es mucho.

-En La Tormenta en un Vaso a menudo recibimos comentarios que desacreditan la labor de nuestros críticos, a veces con un estilo facilón, insultante, cínico. Todos los críticos sabemos lo fácil que es escribir un texto en el cual mofarse del trabajo ajeno signifique enaltecerse uno mismo. Por eso, si los comentarios de ese estilo no llevan la firma de sus autores, no los publicamos. Somos de la opinión que todo puede decirse -incluso lo peor- pero a cara descubierta.

-Por último: no dejéis de leer “Yo confieso”. Es una novela maravillosa, de las que nos recuerdan que la vileza siempre tiene sus motivos.

Care Santos

OTRA COSA

Vean a Revista de Letras (aquí) copiando a Jot Down (aquí).

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33 respuestas a EL AIRE QUE RESPIRAS, Care Santos (RESEÑA CARIÑOSA)

  1. Sinécdoque Chof dijo:

    Yo sólo recuerdo una mala crítica de Careacontecida.

    http://www.elcultural.es/version_papel/LETRAS/20630/Adios_camaradas/

    En realidad no era mala, era un ajuste de cuentas personal con el empresario que acaba de partir peras con su amigo. Así se las gasta.

    • Gastárselas, gastárselas, tengo mis serias dudas.
      Como podrás comprobar en el enlace que has dejado, El Cutural informa que, por la novela (249 páginas), El Funambulista pide 1650 euros, lo que sale a (1650 partido por 249, ¿dónde tendré la calculadora?), un montón de pasta por página, amigo. Y los críticos de postín (y Santos lo es, sin duda), la patilla es la única moneda que conocen. ¡Como para soltar 1650 napos!

    • La voz de su ano dijo:

      Osti, tú, y qué caro el libro, pone que cuesta 16’50 euros.
      Lo que dices es cierto, no pone al libro nada mal, sólo tiene ojeriza al editor y al prologuista. Y ya ha llovido desde que hizo la crítica (en 2007), seis años nada menos, y desde entonces ni una sola crítica negativa más de Care Santos que su omnipresente pega a que los libros son largos y hay que hacerles una pona y documentarlos menos.

      Claro que eso no le pasa nunca a Care, como escribe una docena de libros al año (entre infantiles y de adulto, o quizá son lo mismo), pues sus obras son bien cortitas y sin nada de documentación, todo está en su mente, en su prodigiosa mente.

      Yo creo que Care Santos es un hada, un hada buena, por supuesto.

  2. Arturo Millar dijo:

    Y a mí que me recuerda a la Sombra del viento… ¿No hay ninguna escritora más original en Barcelona? ¡Esto se hunde!

    • Bueno, bonito y barato dijo:

      Cierto, en tal caso, yo haré con ésta lo mismo que con «La sombra del viento»: huir de ella como de la peste.

  3. Sardiflor dijo:

    Apreciada Maggie,
    ya que saltamos de Planeta en Planeta, te planteo una curiosidad. http://www.diaridetarragona.com/tarragona/066820/berta/noy/gana/premi/pin/soler/novela/amor Era editora de Planeta Internacional (dígase Coelho, Moccia, Levi, etc.) y desde 2012 es editora de Espasa ficción y le editan un libro en Temas de hoy (todo queda en el mismo Planeta) primero en catalán y en castellano. Ya te puedes imaginar que aparece en el sigueleyendo de Fallarás http://www.sigueleyendo.es/el-proust-de-berta-noy-editora-de-espasa/ Lo que más me ha hecho reír es que dice odiar el abuso de poder, vamos, que ni 20 pañales aguantan las consecuencias de mis risas. Tampoco te pierdas esto: http://planetadelibros.com/blog/editores/tag/berta-noy/ Es su blog en Planeta del cual copio y cito: «El mensaje de Coelho, extraído de su obra VALQUIRIAS, es potente en su sencillez, valiente e incluso revolucionario en los tiempos que nos toca vivir…»
    ¿Se merecerá tu lupa? Estaría bien dado que nos aburrimos, hace frío y tantas otras cosas.
    Un fuerte abrazo

    • Comeclavos dijo:

      Me he metido por curiosidad en la sección de ciencia ficción de planetadelibros.com y es paupérrima

    • Antieditor dijo:

      Gracias Sardiflor, impagable labor. En pleno centro.

      • Sardiflor dijo:

        Por cierto… «La tormenta en un vaso», como título ya dice mucho de sí, ¿verdad? Tormentitas controladitas de postín y buen ver. Al hilo de Yo confieso, me autoproclamo en un ¡Yo protesto!:tormenta universal y galáctica, plural, todo plural (emulando a Salinas) es lo que de verdad apaga la sed cultural infinita.

  4. aturdido dijo:

    ¡Apasionante! Genuflexiones miles ante tan maravillosa primicia aunque, recapacitando un poco, la encuentro un tanto parca en elogios. De todas formas, es un privilegio acceder antes que nadie a esta nueva muestra de virtuosismo literario de la excelsa autora. Gracias, sargento. Nos iluminas.

  5. personare dijo:

    Como decía Kiko Veneno: «está muy bien esto del cariño» pero, dejando aparte los sentimentalismos, a mí no me atrae lo más mínimo este libro. Todavía me estoy preguntando si esta reseña es irónica, un azucarillo envenenado o, quizás, una desolada muestra de conformismo ante la pobreza del panorama literario español, que no en lengua castellana.

    Novela histórica con exceso de documentación y sorprendente giro final. A-pa-sio-nan-te. Me recuerda a Ruiz Zafón sin haberlo leído. Espero que, al menos, esté bien escrita, para variar.

  6. bamarch dijo:

    No he leído a la tal Care -ni tengo intención- pero lo bueno de esta reseña es que alguien puede darle por error al enlace y descubrire quién es el señor Cabré y sus libros.

  7. Anónimo dijo:

    Cuidado con las reseñas cariñosas, es escribir una y el personal empezar a subirse por las paredes. Debe de ser que follan poco, los pobres.

  8. julian bluff dijo:

    Le dije: «el enamoramiento es algo maravilloso».
    Maggie, admitió: «sí, sin duda, pero también mucho más».
    Yo le respondí: «sea cierta o no, esa finta es magnífica».
    Han pasado ya muchos años desde aquello pero aún recuerdo los reflejos verdosos desventrando nuestras ginebras en aquel escondido chiringuito del Maresme. Care nunca llegó a enterarse.

  9. Grandes Éxitos de los Noventa dijo:

  10. La voz de su ano dijo:

    No sé si habéis leído la reseña literaria híper elogiosa (porque lo que hace doña Care Santos no se puede llamar nunca «crítica» literaria) que hace del libro finalista del premio Planeta «La vida imaginaria», de Mara Torres (por otro lado otra presentadora de telediarios monina galardonada en este certamen, y ya van…). Con leerla ya lo dice todo:
    http://www.elcultural.es/version_papel/LETRAS/32041/La_vida_imaginaria

    • jose dijo:

      Pues hay que tener estómago, por que a mi la buena de Mara me cae muy bien, pero es que su prosa es de redacción de vuelta de vacaciones para alumnos de primero de la eso.
      Vale que el premio Planeta es lo que es, pero hay bestsellers (y aquí lo digo por estructura y temática, por que viendo las sinopsis de los finalistas, quedaba muy claro lo que buscaba la editorial) que están escritos sin virtuosismo pero con oficio (y ya si la trama acompaña, se pueden disfrutar perfectamente), pero me temo que este no es el caso

  11. Por su interés [pueden entender por qué ella sólo hace «critica POSITIVA»] reproduzco a continuación el comentario que dejó Care Santos –la misma- en este blog a la 1:33h del día 12 de diciembre de 2011 cuando hablamos por primera vez de ella, de La tormenta en un vaso y de sus “críticas positivas”.
    Con ustedes Care Santos:
    «Nunca contesto cuando alguien me vitupera -aunque me divierte leer según qué barbaridades cuando se dirigen contra mí, lo confieso- pero hoy siento debo salir en defensa de los muchos colegas que colaboran desinteresadamente desde hace varios años en La Tormenta en un Vaso, un blog de crítica POSITIVA en Internet (el subtítulo lo dice todo, como bien ha apuntado Octavio), que coordino desde hace varios años. Y en el cual también colaboro, como ha quedado dicho, cuando me apetece compartir el entusiasmo que me han despertado ciertas lecturas.
    Creo necesario puntualizar:
    -Que La Tormenta en un vaso es un blog independiente, entendiendo como tal que no estamos supeditados ni, por supuesto, favorecemos a ningún sello editorial ni a ningún grupo. Sin embargo, en nuestras intenciones primeras estaba el dedicar espacio a los sellos independientes que han surgido y surgen en los últimos tiempos. Cosa que hemos hecho y seguimos haciendo.
    -Que en el espíritu inicial estaba también el servir de recomendadores cualificados de lecturas a cualquier persona que ame los libros. Por eso nuestras reseñas siempre son positivas. La cualificación de los críticos es innegable. En ellos radica todo el valor de la página, que es mucho.
    -En La Tormenta en un Vaso a menudo recibimos comentarios que desacreditan la labor de nuestros críticos, a veces con un estilo facilón, insultante, cínico. Todos los críticos sabemos lo fácil que es escribir un texto en el cual mofarse del trabajo ajeno signifique enaltecerse uno mismo. Por eso, si los comentarios de ese estilo no llevan la firma de sus autores, no los publicamos. Somos de la opinión que todo puede decirse -incluso lo peor- pero a cara descubierta.
    -Por último: no dejéis de leer “Yo confieso”. Es una novela maravillosa, de las que nos recuerdan que la vileza siempre tiene sus motivos.
    Care Santos»

    • Peter Folgier dijo:

      «…no dejéis de leer “Yo confieso”. Es una novela maravillosa, de las que nos recuerdan que la vileza siempre tiene sus motivos» Escribió un día en que estaba realmente inspirada.

      De regreso a casa su cabecita pensaba esto a modo stream of consciousness, ordanado y limpio como sabía que estaba su ropa interior…

      «la bondad, nunca bien ponderada, no carece de sus motivos, y sobre todo, de beneficios y consecuencias para quien, como yo, se ve obligada a practicarla porque debo luchar contra mi verdadera naturaleza, he conseguido anestesiar mi aguijón y las ranas no podrán cantar nunca más, las pobres. Compruebo, cómo, mientras, mi vida perfecta de escritora y madre, mi variada obra que transita ya en otras lenguas y los puestos en los que se balancean, o el lugar que ocupo entre los lectores, críticos y quienes, en fin, deciden el Gotha cada temporada, tan amables ellos, casi todos, o al menos los que conciernen. Ser compasiva es lo que tiene, como el buen apetito, si te lo comes todo con los modales apropiados, serás considerada una buena gourmet y nunca una zampabollos insaciable carente de gusto ni directriz gastronómica. Ser como soy es un esfuerzo, sí lo sabré yo. Pero pronto aprendí que en la indulgencia y las buenas maneras de las amigas de mamá tenía el ejemplo de cómo ser invitada a todos lo eventos sociales, hasta tener tu propio Salón, donde recibir sólo a la exclusividad de quien realmente importa, a la larga lo conseguiré, pero por el momento debo acceder a dejar entrar a algún que otro indocumentado con padrino, pero todo sea por la compasión que me inspiran, yo también casi fui uno de ellos a su edad. Supongo que de haber sido hombre, mi bondad hubiera sido menos eficaz, menos productiva, ellos no saben darle ese toque de fidedigna indulgencia mezcla de liviandad de juicio y de elegante laissez faire, tan previsible en el fondo, de mis opiniones. Debería dejar de inventarme pasados, siempre acabas tropezando con la vecina cotilla, y ser Care me ha costado tanto, lo confieso…»

      • Ire dijo:

        Solo un pequeño apunte a tu conmovedor autorretrato, Peter. Toda esta gente ‘olvida’ que su único objetivo es el lector, ese ser anónimo, indocumentado, que forma parte de esa masa amorfa y no identificable, pero del que no puede prescindir, aunque quisiera. No dejarlo opinar, por considerarlo ‘vil’ es, además de infantil, totalmente improductivo a la larga.

    • Volpone dijo:

      Vamos a dejar las cosas claras a la señora Care Santos y demás. La famosa tormentaenunvaso NO es un blog de crítica. La crítica literaria es otra cosa, por favor. Tiene una base y fundamentación teórica. ¿Qué es eso de crítica positiva? Tiene bemoles el asunto, encima se atreve a llamar ‘críticos’ a las personas que escriben allí. Pueden ser colaboradores, opinadores o blogueros, pero eso NO es crítica literaria. Es un dietario de recomendaciones, muchas veces realizadas por amigos directos, indirectos o conocidos de los autores.

  12. antieditor dijo:

    De todos modos, los suplementos culturales que ofrecen reseñas o mal llamadas «críticas», deben dedicarse a ofrecer «presentaciones» de los libros, recensiones, opiniones de nivel periodístico, no sesudas, expertas ni rigurosas críticas de rango canónico, propias de análisis académicos, universitarios. Para lucimientos y rigores, sirve una revista profesional o un blog. Un suplemento cultural tiene que saber combinar en los artículos sobre libros información y opinión, que, obvio es, será subjetiva y argumentada, o no, según estilos y bagaje.

    • Ire dijo:

      De acuerdo, antieditor, la única pega es que no existe ese espacio, ni en internet ni en papel, vete tú a saber por qué oscuros intereses o por qué pocas ganas de meterse en líos. Que los suplementos ofrecen lo que ‘tienen que ofrecer’ no es nada nuevo, pero no encontrar ninguna alternativa a blogs de escritores, compañeros y camaradas, aquí y fuera, es simplemente desesperante.

      • Sardiflor dijo:

        Queridos Antieditor, Ire,
        yo también busco un suplemento cultural en español que otorgue espacio al periodismo de trinchera cultural con los interrogantes necesarios. Hay algún blog suelto (sólo conozco dos) y nada, es que nada de nada más. Todos caen en la masturbación solitaria de su reflejo para que sus lectores se sientan más informados y tengan algo que comentar en los postres de la cena de turno con empalagosa-y ciertamente disimulada- importancia. La masturbación mental es útil siempre que esté acompañada de tantas otras posibilidades de coge intelectual. No reniego de tal acitividad, pero exijo que no sea la única. Así que grito a los cuatro vientos y exageradamente demando hackers culturales, comentaristas, humoristas, periodistas de investigación y gente hiperchic molona que nos deleiten con un suplemento cultural variado y orgiástico. No es una cuestión del cuerpo sino del espíritu, que necesita encenderse y elevarse, ¿verdad?

  13. Comeclavos dijo:

    «En La Tormenta en un Vaso a menudo recibimos comentarios que desacreditan la labor de nuestros críticos, a veces con un estilo facilón, insultante, cínico» Bueno, podemos esforzarnos en este sentido.

    Buenismo, Care : por la caridad entra la peste

  14. Jaime dijo:

    Los de Revista de Letras son lo peor. Por muchas razones.

  15. La voz de su ano dijo:

    Pero es que la jodía de Care y sus acólitos de La Tormenta en una cucharilla de café no es que sólo hagan crítica positiva, es que como a alguien se le ocurra hacer un comentario negativo aunque educado y bien fundamentado (algo que reconozco yo he hecho tres o cuatro veces), tampoco te lo publican. Joder con la censura, que ellos dirán que es buenrollismo y positividad, pero es censura pura y dura.

    • Comeclavos dijo:

      si firmas y te despides atentamente de Care como «la voz de su ano» me imagino que ,aunque entiendan el juego escatológico de palabras con el que tanto me regocijo, se sentirán atacados en la línea de flotación de su buenismo. Te recomiendo que cuando entres la próxima vez firmes como Aitor Menta para sortear la censura.

      • Ire dijo:

        No creas, clavos, aunque argumentes hasta la saciedad y firmes con un nombre y un apellido, real o no, si no les gusta lo que dices no te lo van a publicar. Pero ni ella ni la gran mayoría, por no decir todos. Antes te publicarán cualquier burrada de comentario, por muy anónimo que seas, si les parece que los halagas o que fomentas su imagen de ‘hated’, que también vende.

  16. lala dijo:

    para los que buscan un suplemento cultural nuevo, de calidad y con contenidos,
    El Cuaderno.
    http://elcuadernoculturaldelavoz.blogspot.com.es/

    • Ginebra dijo:

      Bien, lala. Vamos a empezar a leer a escritores que no aparecen en las páginas de cultura de ningún «periódico» (Teniendo, como tenemos, Internet, ¿qué es eso de «periódico»?) A ver si nos enteramos, Sargento, que parece mentira que lo suyo sea una web. ¿A qué viene darle tanta importancia a los suplementos culturales de los «periódicos», esos dinosaurios? Que estamos ya en otra época, Sargento. Que eso de El Mundo, y El País -¡ay!- es del siglo pasado. A ver si nos enteramos: el papel está muerto (y me alegro por los árboles). ¿Quién es Care Santos? ¿Cuántas visitas recibe en su web? ¿De verdad, pero de verdad, creéis que la gente lee a esa tal Care en El Cultural?, ¿en ese papel que cuesta pasta?, con lo mal hecho que está, Qué ingenuidad.

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