El libro está en peligro. Desde este blog, la sargento Margaret y sus amigas estarán atentas a lo que ocurre en el mundo editorial en castellano para denunciar todo aquello que pueda hacer daño al libro. Para contactar: margaret.salvacion@gmail.com
Hasta que se mueran todos los de la generación de la Patrulla, y los de mi propia generación (los cuarentones), e incluso los treintañeros, aún tardaremos muchos, muchísimos años en ver algo como esto.
Espero que para entonces hayan sacado un lector electrónico configurable, y que no parezca que estás leyendo siempre el mismo libro, y mal maquetado. Porque incluso con el super Kindle (que yo poseo), y con libros legales (que los tengo), siempre te da la sensación de estar ante un borrador mal fotocopiado, y no ante un libro como Dios manda.
Lo único que agradezco del Kindle es que me da la opción de saber qué libros quiero comprarme luego en papel, y cuáles no quiero tener ni regalados.
Y lo peor, si es que hay algo peor, es que esos libros seguramente no tengan nada que ver con la literatura, al menos en su mayor parte.
Hasta que se mueran todos los de la generación de la Patrulla, y los de mi propia generación (los cuarentones), e incluso los treintañeros, aún tardaremos muchos, muchísimos años en ver algo como esto.
Espero que para entonces hayan sacado un lector electrónico configurable, y que no parezca que estás leyendo siempre el mismo libro, y mal maquetado. Porque incluso con el super Kindle (que yo poseo), y con libros legales (que los tengo), siempre te da la sensación de estar ante un borrador mal fotocopiado, y no ante un libro como Dios manda.
Lo único que agradezco del Kindle es que me da la opción de saber qué libros quiero comprarme luego en papel, y cuáles no quiero tener ni regalados.