“He tratado así de evitar el amarillismo.” Final de la primera respuesta de Begoña Aranguren en una entrevista digital en EL MUNDO (29 de oct de 2003) . Acababa de publicar el libro sobre Emanuela de Dampierre. El libro se editó en La esfera de los libros con el título de Memorias. Emanuela de Dampierre, 2003. Ya va por la novena edición.
“He huido como de la peste de escribir algo que resultara dramático y triste. Cada vez creo más que todo en este mundo es del color con el que se mira. En esta era de las lentillas de colores, nadie debería presentarse ante los demás con la reprobable intención de inspirar lástima. Por ello, y también para no herir la sensibilidad del lector, se han suprimido insultos y palabras malsonantes, así como las escenas escabrosas”.
Introducción al libro sobre José Luis de Vilallonga. Un diamante falso, La esfera de los libros 2004.
Ya saben aquello de Excusatio non petita, accusatio manifesta. ¿no?
“Qué gentuza”. De este modo recrimina Begoña Aranguren, en entrevista de 10 de mayo de 2011 en la Cadena Ser, que se utilizara televisivamente el cadáver del que fue su marido Jose Luis de Vilallonga. (Minuto 10 de esta entrevista) Cadena Ser. Debe pensar que es ella la única que puede aprovecharse. (pinchen en el enlace, archivo de audio).
Begoña Aranguren lo ha vuelto a hacer. [al revisar el texto me he dado cuenta de que había escritor “hecer”. A punto he estado de dejarlo tal cual. El subconsciente…] ¿Por qué se lo permiten? Muy sencillo, porque vende. ¿Por qué vende? Porque a la gente le gusta la carroña y Begoña la encuentra, la trocea y la muestra como nadie.
Su último libro es Niño mal de casa bien, Planeta 2011. De nuevo utiliza los tres años que estuvo casada con José Luis de Vilallonga. Ya es el tercer libro que escribe sobre él. Pero este es peor porque Vilallonga ya no puede defenderse. En el libro la Aranguren vuelve a airear trapos sucios y pone en labios de Vilallonga cosas como que el príncipe Felipe de Borbón es un malcriado, un niño mimado.
Todo esto podía tener algo de sentido si Vilallonga no hubiera contado sus cosas, pero resulta que sí lo hizo. Plaza & Janés publicó entre 2000 y 2004 en 4 volúmenes las memorias del marqués de Castelbell. La sinceridad de Vilallonga es aplastante en estos libros. Por ejemplo, reconoce que se portó como un canalla con su primera mujer, Priscilla Scott-Ellis, Pero Begoña sabe que a la carroña siempre se le puede sacar más jugo.
No es la primera de Begoña. Desde hace años se dedica a visitar a viejos famosos o moribundos con renombre para filmar unas entrevistas que luego empaqueta como documental y la TV emite con el nombre de Epílogo cuando el personaje fallece. Dice Begoña que uno de los pocos que se le han resistido es Santiago Carrillo. Puede que por eso siga vivo. Y por muchos años, Don Santiago.
En una de esas visitas encontró petróleo y lo público en forma de memorias en La esfera de los Libros. Doña Emanuela de Dampierre, esposa del infante Don Jaime de Borbón y Battemberg, madre de Don Alfonso y tia carnal del actual rey de España tenía 90 años, y parece que la cabeza no muy allá, cuando en 2003 cayó en las garras de Begoña. Doña Emanuela es y ha sido toda una señora pero las buenas/malas artes de Begoña la hicieron contar todas aquellas inmundicias que pudimos leer en los adelantos que El Mundo (no obstante pertenece al mismo grupo editorial de La esfera de…) publicó por aquellas fechas. Un par de ejemplos:
Un día, hablando con un médico, me enteré de que las personas que padecen la misma discapacidad que Jaime tienen desarrolladísimo su instinto sexual y, desde luego, puedo dar fe. Si esta conversación sobre las causas de su incontinencia sexual se hubiera producido antes, creo que no me habría separado. Pienso que, de alguna manera, hubiera resistido junto a él con el fin de continuar haciendo vida en común, siempre y cuando ésta se limitara a convivir bajo el mismo techo.
(…)
No es menos cierto que el cariño y simpatía que yo profesaba a Don Alfonso XIII fueron enormes. Es posible, también, que le quisiera todavía más que lo que quise a la Reina. No obstante, este hecho no me impide ser objetiva y saber que hablo de alguien muy superficial. Me acuerdo de haber ido con él y algunos otros miembros de la familia a un concurso hípico en Roma y que cuando pasó una chica vendiendo cigarrillos con el traje muy ceñido al cuerpo, el Rey, haciéndose el despistado, la tocó al pasar. Yo, avergonzada, volví la cara hacia otro lado simulando no haber visto nada, pero él, que era muy intuitivo, me preguntó: «¿Por qué te sonríes?» En público, delante de mí y de gran parte de su familia, debiera haberse comportado de otro modo, ¿no? Por lo visto, el trasero de las mujeres es de gran importancia para los hombres. También recuerdo que en una ocasión, bajando con mi cuñado Juan en un ascensor, me tocó ahí y me dijo: «¡Qué dura estás!» ¿Qué otra cosa podía pensar sino que tenía a quien salir?
Pero Begoña dice que evita el amarillismo, que no saca escenas escabrosas. Y Planeta editando los libros de esta…”señora”.
– Pero Margaret, a esta señora le dieron el premio Azorín de novela en 2010.
– Si, Samantha, pero no te engañes. Ese premio ya no lo concede la diputación de Alicante sino quien pone la pasta, es decir, la editorial Planeta, su editorial.
Si el tito José Luis levantara la cabeza.
Como Begoña Aranguren hubiera querido nacer princesa, como poco, hoy la invitamos a un coctel aristocrático llamado Coctel Negroni porque lo inventó el conde Camillo Negroni en el bar Giacosa de Florencia:
Ingredientes para 1 persona
6 cubitos de hielo picados
1 medida de ginebra
1 medida de Campari
1/2 medida de Vermut dulce
una espiral de naranja
Preparación
1-Ponga el hielo en un vaso mezclador
2-Añada la ginebra, el Campari y el Vermut y remueva bien.
3-Sirva en un vaso bien frió y decore con el espiral de naranja.
Si me permite, mi Sargento:
-Hay un «no obstante» que sin duda debería ser «no en vano»
-La disyuntiva entre viejos famosos o moribundos resulta involuntariamente cómica; serán más bien famosos viejos o moribundos
Claro que te permito, querido Ignacio.
He revisado lo de los viejos y moribundos y entiendo que no está tan mal. Esta señora busca famosos que estén cerca de la muerte, bien por edad o por enfermedad. Pero, puede que tengas razón. El «no obstante» no es mío. Forma parte de un entrecomillado. es decir se trata de la transcripción de las palabras de Emanuela de Dampiere realizada por Begoña Aranguren. Es un trozo de su libro.
De todos modos te agradezco que estés ahí, por si acaso.
Un saludo
La sargento Margaret
Vaya, me sabe mal haber corregido sin darme cuenta a doña Emanuela, pobriña.
En lo otro tal vez he sido demasiado tiquismiquis, pero me refería al orden de los factores: si la tal carroñera busca viejos famosos o moribundos podrá encontrar bien a José Luis Sampedro (viejo famoso) o a un señor cualquiera en la UVI (viejo moribundo).
Por eso proponía yo la alternativa: famosos viejos o [famosos] moribundos.
Pero vaya, son ganas de hilar fino.
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Estimada sargento Margaret,
Tiene usted tanta, tantísima razón… Y me gusta tanto, tantísimo, su labor de desenmascarar y hablar claramente.
Por razones que no vienen al caso, hace un par de años me enfrenté a un original de Begoña Aranguren. Era su documento Word de un texto entregado a la editorial para un librillo que, creo recordar, paso sin pena ni gloria. Leer aquello (corregir aquello) fue uno de los momentos de mi vida en que me pasado más vergüenza ajena: el texto estaba plagado de erratas de todo tipo (ortográficas, tipográficas, sintácticas, lexicales…). Y no solo vergüenza sino también indignación. ¿No era esta señora periodista? ¿No pertenece a una generación de gente bien educada que conoce a la perfección la lengua española y que ha estudiado en los mejores centros? ¿No predica la decencia, la honradez, etc.? Entonces… ¿cómo se puede escribir tan mal y no molestarse siquiera en pasar un vulgar corrector de Word?
Sin comentarios.
Querida mgm:
Te agradezco mucho que nos cuentes esto aquí. Es un dato muy importante para saber a quien y qué estamos comprando.
Un beso fuerte.
La sargento Margaret
No nos pararán!!
Lucharemos hasta la victoria!!!