UN NUEVO “FAKE” DEL THE NEW YORK TIMES

   La decisión de la fiscalía fue el punto de partida para Malak, quien en solo una semana cambió por completo el aspecto de la habitación. Cerró la puerta que comunicaba con la azotea y abrió otra gran puerta que daba al patio interior donde colocó un gran letrero de plástico en el que escribió con grandes caracteres árabes y  latinos: “CAMISAS MALAK”. En el interior dispuso una gran mesa de trabajo y varios sillones para que los clientes esperasen. En la pared colgó una imagen de la Virgen María y una copia de un artículo en inglés de The New York Times titulado: “Malak Khila, el gran sastre egipcio”, en el cual un periodista americano relataba a toda página las habilidades del maestro Malak en el corte y confección de camisas. En el centro del artículo había una gran foto suya con el metro al cuello, completamente absorto en el corte de un retal de tela, aparentando no darse cuenta de que estaba  siendo fotografiado.

   Cuando le preguntaban por este artículo, Malak contaba que un extranjero, que más adelante resultaría ser corresponsal de The New York Times en El Cairo, llegó un día interesado en arreglar unas camisas. Al día siguiente Malak se sorprendió al verle llegar otra vez con unos fotógrafos extranjeros que le hicieron ese reportaje, debido a que estaban maravillados por sus habilidades como sastre. Contaba esta historia con toda naturalidad y lanzaba una mirada furtiva a quien le escuchaba. Si veía en su rostro indicios de duda cambiaba rápidamente el tema de la conversación, como si no hubiese dicho nada. Sin embargo, si parecía creerle, proseguía, afirmando que el extranjero le había rogado que le acompañase a América para trabajar de sastre allí con el sueldo que él quisiese. Sin embargo, por supuesto, había rechazado esta proposición porque él odiaba la vida en occidente. Malak terminaba su relato diciendo  con orgullo y convencimiento:

–          Ya se sabe, los países extranjeros andan buscando sastres hábiles.

   Pero la verdad de toda esta historia era que en la plaza de Ataba había un fotógrafo llamado Basiuni que montaba artículos alabando las habilidades de cualquiera en un periódico a elección del cliente, por diez libras en un periódico árabe o por veinte en uno extranjero. Solo necesitaba el nombre del periódico y una foto del cliente. Tenía preparados textos en los que el redactor hablaba de una maravilla oculta que había encontrado en las calles de El Cairo, ya se tratara del taller del genial sastre Fulanito o del grandioso restaurante de Kebab de Menganito. Basiuni juntaba todo esto con precisión en su máquina fotocopiadora y obtenía una copia que parecía sacada del periódico.

El texto que acaban de leer aparece en las páginas 110 y 111 de la edición de bolsillo (MAEVA, 2008) de El edificio Yacobián de Alaa Al Aswany. Malak, el sastre, es uno del los inquilinos del edificio que da título a esta  magnífica novela.

La realidad -la muy puñetera- supera, una vez más, a la ficción.

Les dejo, perdónenme, y me marcho corriendo a arreglarme, que esta tarde salgo de penitente en la procesión. Ofreceré mi sacrificio por los pecados de los escritores españoles y por la salvación de la literatura. Ah, y por las focas del ártico.

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9 respuestas a UN NUEVO “FAKE” DEL THE NEW YORK TIMES

  1. Ciro dijo:

    ¿ Quedan focas en el ático ? Yo pensaban que eran ratas… ese ruido… todo el día arriba y abajo . Las focas en misa del cuello de las socias de la Ópera . Dichosa mescalina .

  2. Antonia Kardigan dijo:

    Ya que sacamos a colación un libro de la editorial Maeva un día podríamos hablar del marketing que emplean para promocinar sus obras. A mí personalmente me hace mucha gracia que en la portada de algunos de sus lanzamientos colocan una pequeña pegatina roja redonda que dice «Libro del Año». Lo gracioso es que esa pegatina se la ponen a cinco o seis títulos cada año desde hace una década, así que para Maeva en los últimos diez años han transcurrido en realidad 50 años. ¡Qué rápido pasa el tiempo!

    Luego, indagando un poco, te enteras que tal novela que según Maeva es Libro del Año en realidad fue escogida como Libro del Año por la biblioteca luterana de Upsala, o por la red de colegios para inuits de Groenlandia, o cosas así de exóticas. ¡Ay las hermanas Maite y Eva Cuadros con sus promociones, son un primorrrrrrrrrrrrrrr!

  3. julian bluff dijo:

    ¡Hola a todos!

    Esta sí que me la he leído, mira por donde. Escenas costumbristas muy bien traídas con indisimuladas reminiscencias de los grandes maestros del género. Nos traerá a la cabeza, seguro, evocaciones de Mahfuz, por tratarse, igual, de otro escritor egipcio. Nuestras felicitaciones expresas, asimismo, al traductor de la novela, Alvaro Abella. ¿Cuándo, demonios, los críticos adoptarán una postura cabal al respecto y reconocerán, y dejarán sentado, que, cuando lo que están reseñando es una obra traducida sus opiniones sobre la misma se hallan siempre mediatizadas por la intervención del traductor?.

    Mira, Maggie, de tantas bolas como mete la gente, a mi me cabe, ya, hasta poner en cuestión la gran gesta del arte español del siglo XX, y, esto, suponiendo que los toreros encajen en el calificativo de artistas ¿Será de verdad cierto que Luis Miguel Dominguín llegó a acostarse con la Ava Gardner?

    Ah, se me olvidaba; siguiendo la nueva tendencia en boga, mis sentidas disculpas por no firmar con mi verdadero nombre (que hay que ver lo finolis que queda añadirles a los comentarios esta puntualización y lo bien que les puede venir a estos mugrientos barracones que de vez en cuando nos colemos de incógnito, entre la reclutada iletrada, excelsos paladines de la literatura futura).

  4. X-power dijo:

    Lo de que Juan Casamenor no se haya aún posicionado respecto al fake de la Rico empieza a apestar. Queremos su cabeza ya! Tanto decir que Páginas de Espuma ha hecho muchísimo por el cuento español, y en todo su enorme catálogo lo único bueno que ha publicado han sido los libros de Ángel Zapata, Matías Candeira e Inés Mendoza.

    • Volumetrico metrico dijo:

      Totalmente de acuerdo.

      • Antonia Kardigan dijo:

        Y Andrés Neuman, por favor, no se me olvide usted del gran Neuman y todas sus indispensables antologías para la Literatura Iberioamericana y el porvenir de los pueblos. 😦

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  6. estherwilliams dijo:

    Anda, que ya os vale, Escuela de Letras, ya os vale. ¡X-Power! O eres Ángel o eres Matías o eres Inés en una nueva promo de lo tuyo. O los tres a la par. Y sin que se te ponga de punta el vello de los huevos. Desde luego… Ah, y Neuman os da un repaso con el peor de sus cuentos que lo podéis flipar.

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