Desde hace unos años, los Reyes Magos (que son unos cabrones), sólo nos traen malas noticias. ¿Por qué no abdican también esos incompetentes? En enero de 2012, sus graciosas majestades -fueron ellos, un republicano Papa Noel no lo hubiera permitido- nos anunciaron que MC Ediciones, empresa que publicaba y publica la revista Qué Leer (y entonces 70 cabeceras más) se declaraba en concurso de acreedores. La empresa presentó un plan de viabilidad mediante el cual cerraba las revistas no rentables (la mayoría) y se quedaba con las que tenían futuro, entre ellas Qué Leer. Hoy la cosa va mejor y el 13/02/14, con su correspondiente anuncio en el BOE, se cerró el concurso de acreedores y se pasó a la fase de convenio.
En aquellos duros momento de hace dos años y medio nos pusimos en contacto con Milo Krmpotic, redactor jefe de la revista y entonces (como ahora) uno de los dos únicos -con Antonio Iturbe- empleados de la publicación literaria. En los primeros meses de Patrulla de Salvación, Milo entraba mucho a comentar en nuestro blog y luego nos enrollábamos contando cotilleos por gmail y eso. Hoy Milo está disgustado conmigo y cuando le mando alguna pregunta me responde con monosílabos y si hay suerte con onomatopeyas. Es lo que tiene la guerra, los amigos duran poco. Pero a lo que iba: nos contó con detalle lo que estaban sufriendo con el concurso de acreedores y la escasez de medios con que trabajaban. No les voy a dar detalles, pero hay que reconocer que Antonio y Milo le echaron un par.
nº 200
Porque conocemos todo aquello y porque compramos la revista desde su primer número (hace 19 años), nos alegramos tanto de que hayan cumplido los 200 números. ¡¡Enhorabuena!!
La revista, fundada por el matrimonio Elisenda Nadal-Jesús Ulled, nació en 1995 con la intención de que fuera la Fotogramas de los libros, totalmente alejada del coñazo que eran -y son- las revistas y suplementos literarios de la época. El primer consejo editorial de la revista estuvo formado -¡atención!- por Jorge de Cominges (director), Antonio Iturbe (redactor jefe), Margarita Riviere, Sergio Vila-Sanjuan y la citada pareja Nadal-Ulled. ¡Casi na! Todo esto nos lo recuerda Toni Iturbe en un imprescindible artículo sobre la historia de estas dos centenas de ejemplares en las páginas centrales de este número 200 de Qué Leer. Muchas cosas han pasado en esta gaceta de la actualidad literaria. Quien no recuerde, por ejemplo, las crónicas de Anibal Lector, demuestra que no se ha enterado de gran cosa en lo referente a edición de libros en la España de estas dos últimas décadas. ¿Y los cabreos que nos hemos cogido por los dichosos tinteros en las reseñas? Más de 4.000 críticas literarias publicadas por Qué Leer en estos 19 años.
En los años entorno a 2005 se llegaron a vender más 100.000 ejemplares (dato EGM) mensuales. En aquella época, se criticaba la revista diciendo que era «el HOLA de los libros». Los números de hace 10 años -era época de bonanza económica y de mayor gasto en libros por parte del consumidor- estaban plagados de anuncios, de reportajes sobre fiestas literarias, entregas de premios y demás colorín. Este nº 200 que tengo en las manos sólo tiene un 10% de páginas dedicadas a la publicidad. Hoy la revista -quizás porque ya no debe pleitesía a los grandes anunciantes- es un inmejorable mostrador en el que enterarse de lo que ocurre en el mundo editorial español. Para que vean, unas gafas: Además de las reseñas y las noticias de actualidad, pueden ustedes leer en este número un extenso artículo sobre John Dos Passos, entrevistas con Maruja Torres, Maha Akhtar y Xavi Ayen (autor del insuperable «Aquellos años del Boom«, RBA, 2014) y un largo y divertido reportaje sobre literatura juvenil entre otras cosas. Se habla de superventas, sí, pero también de libros como este que lo van a comprar tres personas: el autor, su novia y su padre. Y, a lo mejor, algún estudiante despistado de medicina. Aunque Olmos diga en la reseña en la revista que es cojonudo. Qué iba a decir Alberto de un libro rarito como este. (Aquí la reseña) También hay una entrevista, en la sección «Bestiario Editorial» de la última página, con los editores (independientes) de dicho volumen.
nº 201
Si eres un perroflauta letraherido de esos que no quiere saber nada sobre libros que no sean los de Tao Lin y David Foster Wallace, no compres Qué Leer. Si eres tan cultureta que te dan arcadas sólo con oír nombres como los de Dan Brown o John Grisham, no compres Qué Leer. Pero si eres una persona inteligente -sin prejuicios- que no quiere irse a la tumba sin haberlo probado todo (literariamente se entiende); que necesita comparar y así elegir lo mejor, entonces compra Qué Leer. Si te interesa saber qué pasa en el mundo editorial; qué se lee entre el público que sigue encendiendo un libro con la última página del anterior, entonces, definitivamente, compra Qué Leer. Si leer es un placer para ti, compra Qué Leer. Osti, tú: perdón por la última frase, parece de una sinopsis o de una faja.
¿Dónde está la explicación sobre el artículo «El Jilguero y el envidioso»? ¿En el nº 101 de la revista QUÉ LEER, quizá?
Menos lobo cariño… menos lobo…
Patrulleras, me estáis dejando con el culo al aire delante de mis amistades: tres deposiciones ya… y sin noticias del frente. En ese lenguaje militar que tan caro os resulta, parece que habéis perdido la batalla contra JGJ, pero os negáis a publicar el oportuno parte de guerra.
Frente «Al enemigo… ni agua», seguid el ejemplo imperecedero de Pepe Isbert: «Vecinos de Villar del Rio, como alcalde vuestro que soy…»
Encima, es evidente que no saben hacer uso del lenguaje para transmitir, de forma velada, la verdad que subyace en la misteriosa desaparición del artículito de marras. ¿Qué les parece una fábula con animalitos?, a lo «Rebelión en la granja». Ains… Si es que hay que dárselo todo mascadito…
QUÉ PASÓ CON EL POST DEL JILGUERO Y EL ENVIDIOSO?????
Grito porque creo que las patrulleras están un poquitín sorditas y no se enteran……
¿No decís nada de la compra de «Círculo de lectores» por Planeta? . El 100%. Lara, the fucking master
¡¡¡¡NO SUS METÁIS CON LOS REYES MAGOS!!!
>:-(
Una que entierra a este blog para siempre. Anda y que os den, hipócritas.