Hasta hace unos minutos, aquí se podía leer un «post» que no era más que una broma, una forma original -así lo entendimos- de dar la enhorabuena a una persona a la que no conocemos de nada y con la que nunca hemos tenido contacto alguno. No la conocemos, pero por referencias nos consta que es una buena profesional y que merece el éxito que ha alcanzado recientemente. Nos consta también que esta persona es inteligente y que no se ha molestado por lo que aquí escribimos ayer. Pero comprobando cómo lo han interpretado algunos subnormales -que se dedican al mismo oficio- y no queriendo perjudicar en lo más mínimo a alguien que no lo merece, hemos decidido -una pena porque era muy ingenioso- borrar el «post» de marras. Está visto que en el mundo editorial patrio el humor y la inteligencia no abundan.

Agur.